viernes, 31 de julio de 2009

Declaración ante el Golpe de Estado en Honduras

Carta Abierta Santa Fe se pronuncia por la restitución, sin ningún tipo de condicionamientos del legítimo y único Presidente de Honduras, Manuel Zelaya.

Repudiamos la violenta represión de las manifestaciones populares por el retorno de la democracia en Honduras, así como la persecución y detención de dirigentes políticos y sociales, hechos ocultados por los principales medios de comunicación, que hablan de “enfrentamientos” entre las fuerzas militares y los manifestantes.
Asimismo, Respaldamos las gestiones de los presidentes del ALBA, de todos los espacios internacionales que se han pronunciado contra el Golpe de Estado y la decisión de nuestra presidenta, de movilizarse activamente en apoyo del gobierno constitucional de Honduras.

Quienes han provocado este golpe de estado son fuerzas reaccionarias, en alianza económica y política, con el apoyo de la Iglesia Católica, de los sectores oligárquicos, mediáticos, y con las fuerzas armadas como brazo ejecutor. No es casual que este hecho se produzca en el momento en que desde el gobierno del Presidente Manuel Zelaya se impulsaba la realización de un plebiscito para posibilitar una reforma constitucional popular, progresista e inclusiva.
Esta acción facciosa en Honduras es la primera y antes de preguntarnos que países le seguirán debemos poner todos nuestros esfuerzos en derrotarla, de modo de evitar su repetición en el resto.
Este golpe fascista, atenta sin dudas contra todas las democracias de nuestro continente y no es un hecho aislado, sino que es el comienzo de una acción coordinada por todas las fuerzas reaccionarias de cada país vinculadas en un esfuerzo por recuperar los poderes actualmente perdidos.
Apelando a la memoria histórica, creemos necesaria una mirada a nuestro pasado reciente para recordar que fue en Honduras, donde en la primavera de 1981, se instalo el Centro del comando del “Grupo Exterior de Tareas”, como llamaban los generales argentinos a la fuerza parapolicial que contribuyeron a establecer. Los golpes de estado fueron una política única para toda nuestra América.
Desde aquel ayer surgen estos “fantasmas”, herederos de aquellos que produjeron el exterminio de más de 250.000 personas en nuestro continente, estableciéndose un hilo conductor desde esos años oscuros hasta nuestros días.
Advertimos que los sectores autores de acciones desestabilizadoras en varios países de Latinoamérica, han comenzado a construir una absurda” teoría de la democracia “, por la cual los gobiernos elegidos por el voto popular, como es el caso de Venezuela, Ecuador, Bolivia, Argentina, Honduras, Nicaragua, que adoptan posiciones a favor de la Justicia social, de profundización de la democracia, y de la conformación de bloques independientes del imperialismo, son denominados populistas, antidemocráticos, justificando por consiguiente, acciones destituyentes hacia los mismos.

A más de treinta años de las épocas de terror impuestas por las dictaduras en Latinoamérica, es nuestra responsabilidad la solidaridad activa con el pueblo hondureño y su lucha por la recuperación del orden democrático.

CARTA ABIERTA SANTA FE – Julio/2009

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