Pino, sos un gran cineasta, nadie lo puede negar. Un peronista de la primera hora que se dedicó a documentar el Movimiento durante la resistencia y al General durante su exilio. Como olvidar tu obra combativa y fervorosa "La Hora de los Hornos”, que de forma clandestina recorría las villas donde la Juventud Peronista daba la vida por Perón. Verla hoy te pone la piel de gallina. Tampoco podemos negar que fuiste un político con huevos en los 90 que se enfrentó con el Menemismo (aunque en un comienzo estabas bastante cerca, como muchos otros, ilusionados con el traidor de patillas), lo que te costó sufrir un atentado cobarde por sicarios anónimos.
Nos expusiste la cruda realidad del fracaso de la Alianza, pusiste en la pantalla, con mucho arte, los destrozos de las privatizaciones y mostraste que existía una Argentina Latente. Épicos documentales de un militante.
Es un lastima, Pino, que te hallas alejado de los compañeros, que estés priorizando tu propia verdad sobre la realidad y que el político no sepa distinguir entre el documentalista que denuncia y el líder con soluciones concretas. El cine como herramienta de cambio es válido, pero no suple la falta de propuestas y la responsabilidad de obstaculizar un proyecto tras el cual el campo popular y nacional debería volver a ser uno. Es una lastima, Pino, que cuando hablas en los medios te olvides de algunas cosas. Pareciera que con el tiempo, algunas medidas de los gobiernos K van desapareciendo y quedan en la nada, no son buenas ni malas, no existen. Lo mismo le pasó al Movimiento con la constitución del 49, esa que tanto queremos: dejó de existir, ni buena ni mala, la nada.
Volviendo al hoy, parece que para vos no existió la estatización de los fondos jubilatorios y el fin de las AFJP. Si te pones a sacar cuentas, y estoy seguro que ya lo hiciste, el negocio de las AFJP fue incluso superior, en los montos y en el saqueo, a cualquier otra privatización, incluso la de YPF. Así de impresionante fue el negocio al que el gobierno puso fin, del que nada decís. Se te olvida también la recuperación del correo y de aguas por el Estado. Es curioso, pero también se te olvida hacer una mención, aunque sea mínima, a la recuperación por el Estado de la Fábrica de Aviones de Córdoba, protagonista de tu “Argentina Latente”: nada, no existió, no pasó. Yo sí me acuerdo de cuando entrabas a los hangares vacíos con la cámara atrás y la nostalgia te recorría el cuerpo. Contabas del “Pulqui” y te remontabas como en una nube al primer Perón.
Ahora no decís nada, justo ahora que esos hangares son nuestros y quizá, porque no, el “Pulqui” renazca como el ave Fénix, como vos siempre soñaste. Pero no decís nada.
Ya sé que para vos no alcanza, es poco, es maquillaje. ¿Pero te parece justo decir que la política de los K es más de lo mismo? Con sinceridad, Pino, ¿realmente pensás así? La verdad es que no te entiendo, o hay algo que yo no sé.
Te olvidas, Pino, de las reformas de Nilda Garre en el ejército y la derogación del Código de Justicia Militar (ni el tío Cámpora se metió con eso). Tampoco decís nada de la Ley de Medicamentos Genéricos que terminó con otro de los grandes negociados: el de los laboratorios que lucran con la salud de la gente. ¿Por qué Pino no hablas de eso? ¿Por qué?
Está bien que para sumar votos haya que criticar, y que para criticar con fuerza haya que evitar cualquier tipo de reconocimiento por más que sepas, como buen peronista que sos, que son pasos muy importantes, avances enormes, profundos e históricos, y no meras medidas aisladas o simple demagogia. Pero no reconoces absolutamente nada. Hasta la política de Derechos Humanos te parece floja.
¿Y el proyecto de la nueva ley de medios audiovisuales? ¿Y la ley de reconocimiento al Genocidio Armenio? ¿Y la notable baja del desempleo y el trabajo en negro? ¿Estas iniciativas no tienen que ver con distribuir el ingreso? ¿Decís que es más de lo mismo? No creo, Pino, que el neoliberalismo sea aumentar la obra pública keynesiana para evitar los despidos y aumentar el consumo interno y la producción. Vos decís que si, que estamos en la misma. Yo no creo que lo creas.
¿Y la re negociación de la deuda con los bonistas? ¿Cuanto ahorramos con eso? ¿Y los aumentos en la inversión para la universidad pública? Nada, no existen. Tampoco decís nada sobre la decisión política de la gestión kirchnerista de no reprimir la protesta social. Nada. Un temita menor que no merece comentarios de tu parte.
Estoy de acuerdo con vos, Pino, los recursos naturales son la gran deuda, recuperar el subsuelo, el petróleo y terminar con el negocio de las mineras contaminantes es el desafío que tenemos por delante, como muchos otros, pero como decía el General “las revoluciones se hacen con sangre o con tiempo”.
La política es un camino largo, con obstáculos (grandes y sojeros obstáculos) y recién estamos empezando a caminar con la cabeza en alto, después de años y años de humillaciones, con un proyecto que puso el pecho y algo más. Ahora hay que profundizarlo, y para eso hay que defenderlo. Hay errores y muchas dificultades, sin duda, claro que sí. Pero Pino, hay cosas que no se pueden negar, olvidar o minimizar: es poco serio (y ético).
Esto recién empieza, el proceso es largo, el enemigo se acomoda (si la Sociedad Rural Argentina está de un lado, sé donde tengo que estar yo), están esperando para volver con todo y darnos duro. Se hizo mucho, muchísimo, y falta más todavía. Pedirle al Kirchnerismo que logre desmantelar totalmente las estructuras neoliberales, con mas de 50 años de construcción, en 6 o 7 años, es como haberle pedido a San Martín que cruce los andes en un día.
Nos expusiste la cruda realidad del fracaso de la Alianza, pusiste en la pantalla, con mucho arte, los destrozos de las privatizaciones y mostraste que existía una Argentina Latente. Épicos documentales de un militante.
Es un lastima, Pino, que te hallas alejado de los compañeros, que estés priorizando tu propia verdad sobre la realidad y que el político no sepa distinguir entre el documentalista que denuncia y el líder con soluciones concretas. El cine como herramienta de cambio es válido, pero no suple la falta de propuestas y la responsabilidad de obstaculizar un proyecto tras el cual el campo popular y nacional debería volver a ser uno. Es una lastima, Pino, que cuando hablas en los medios te olvides de algunas cosas. Pareciera que con el tiempo, algunas medidas de los gobiernos K van desapareciendo y quedan en la nada, no son buenas ni malas, no existen. Lo mismo le pasó al Movimiento con la constitución del 49, esa que tanto queremos: dejó de existir, ni buena ni mala, la nada.
Volviendo al hoy, parece que para vos no existió la estatización de los fondos jubilatorios y el fin de las AFJP. Si te pones a sacar cuentas, y estoy seguro que ya lo hiciste, el negocio de las AFJP fue incluso superior, en los montos y en el saqueo, a cualquier otra privatización, incluso la de YPF. Así de impresionante fue el negocio al que el gobierno puso fin, del que nada decís. Se te olvida también la recuperación del correo y de aguas por el Estado. Es curioso, pero también se te olvida hacer una mención, aunque sea mínima, a la recuperación por el Estado de la Fábrica de Aviones de Córdoba, protagonista de tu “Argentina Latente”: nada, no existió, no pasó. Yo sí me acuerdo de cuando entrabas a los hangares vacíos con la cámara atrás y la nostalgia te recorría el cuerpo. Contabas del “Pulqui” y te remontabas como en una nube al primer Perón.
Ahora no decís nada, justo ahora que esos hangares son nuestros y quizá, porque no, el “Pulqui” renazca como el ave Fénix, como vos siempre soñaste. Pero no decís nada.
Ya sé que para vos no alcanza, es poco, es maquillaje. ¿Pero te parece justo decir que la política de los K es más de lo mismo? Con sinceridad, Pino, ¿realmente pensás así? La verdad es que no te entiendo, o hay algo que yo no sé.
Te olvidas, Pino, de las reformas de Nilda Garre en el ejército y la derogación del Código de Justicia Militar (ni el tío Cámpora se metió con eso). Tampoco decís nada de la Ley de Medicamentos Genéricos que terminó con otro de los grandes negociados: el de los laboratorios que lucran con la salud de la gente. ¿Por qué Pino no hablas de eso? ¿Por qué?
Está bien que para sumar votos haya que criticar, y que para criticar con fuerza haya que evitar cualquier tipo de reconocimiento por más que sepas, como buen peronista que sos, que son pasos muy importantes, avances enormes, profundos e históricos, y no meras medidas aisladas o simple demagogia. Pero no reconoces absolutamente nada. Hasta la política de Derechos Humanos te parece floja.
¿Y el proyecto de la nueva ley de medios audiovisuales? ¿Y la ley de reconocimiento al Genocidio Armenio? ¿Y la notable baja del desempleo y el trabajo en negro? ¿Estas iniciativas no tienen que ver con distribuir el ingreso? ¿Decís que es más de lo mismo? No creo, Pino, que el neoliberalismo sea aumentar la obra pública keynesiana para evitar los despidos y aumentar el consumo interno y la producción. Vos decís que si, que estamos en la misma. Yo no creo que lo creas.
¿Y la re negociación de la deuda con los bonistas? ¿Cuanto ahorramos con eso? ¿Y los aumentos en la inversión para la universidad pública? Nada, no existen. Tampoco decís nada sobre la decisión política de la gestión kirchnerista de no reprimir la protesta social. Nada. Un temita menor que no merece comentarios de tu parte.
Estoy de acuerdo con vos, Pino, los recursos naturales son la gran deuda, recuperar el subsuelo, el petróleo y terminar con el negocio de las mineras contaminantes es el desafío que tenemos por delante, como muchos otros, pero como decía el General “las revoluciones se hacen con sangre o con tiempo”.
La política es un camino largo, con obstáculos (grandes y sojeros obstáculos) y recién estamos empezando a caminar con la cabeza en alto, después de años y años de humillaciones, con un proyecto que puso el pecho y algo más. Ahora hay que profundizarlo, y para eso hay que defenderlo. Hay errores y muchas dificultades, sin duda, claro que sí. Pero Pino, hay cosas que no se pueden negar, olvidar o minimizar: es poco serio (y ético).
Esto recién empieza, el proceso es largo, el enemigo se acomoda (si la Sociedad Rural Argentina está de un lado, sé donde tengo que estar yo), están esperando para volver con todo y darnos duro. Se hizo mucho, muchísimo, y falta más todavía. Pedirle al Kirchnerismo que logre desmantelar totalmente las estructuras neoliberales, con mas de 50 años de construcción, en 6 o 7 años, es como haberle pedido a San Martín que cruce los andes en un día.
Por Emiliano Gareca (abogado)
12 comentarios:
tambien se olvido de la inflacion, el saqueo de los minerales, el salario a 1500 pesos cuando la canasta es de 3500 pesos, los negocios con las cerealeras,el patrimonio de los K que subio de 1 millon a 10 millones en 6 años, etc
www.fumarpaco.com.ar
ahi esta el verdadero Kirchner
"Pedirle al Kirchnerismo que logre desmantelar totalmente las estructuras neoliberales, con mas de 50 años de construcción, en 6 o 7 años, es como haberle pedido a San Martín que cruce los andes en un día."
mas claro imposible.
Simpatizante K:
me parece que tenés razón en algunas cosas. Sin embargo, deberías reconocer que una de las pocas propuestas serias para estas elecciones de junio 2009 son las de Proyecto Sur y Partido socialista.
Lo de las testimoniales de K y el manco Scioli (ex menemista sin patillas) es intolerable). Peor aún, cada vez que veo a Cristina y Kirchner junto a Moyano siento ganas de vomitar. ¿Transar con lo peor del gremialismo peroncho nefasto es querer un país mejor? Ni hablar de cierta pareja militante que en los 70 ejecutaba deudas hipotecarias y hoy se rasgan las vestiduras por la distribución de la riqueza. Mucho menos hablemos de los fondos de Sta. Cruz.
Cordiales saludos.
gremialista peroncho si, nefasto no, lo elegimos los representados, los trabajadores, los compañeros que realmente defienden a los trabajadores, lo votamos y ahí está, sin discusión.
Los que elegimos, los que votamos y pagamos la cuota sindical, somos los únicos que podemos opinar de las centrales obreras entiéndalo gorilas de mierda. No se metan no los representa a Uds. sino a los trabajadores que estamos conformes. maria.
El posteo es brillante!!! me encantó, pasa que estos que se dicen progres, ya no tienen quien los represente, porque están dejando hablar demasiado al inconciente sus candidatos, con los verdaderos propósitos y verdades "me opongo a todo porque garpa" o tengo planes para mis empresas como el PRO (macri y de narvaez)!!! maria.
Che Fernando Tognis una consulta ¿El Partido Socialista con propuestas serias? mmmm ¿liberar retenciones 90 días? ¿El mejor candidato es Giustinniani un títere de Lilita que votó a favor de la ley de flexibilidad laboral? Ese señor es un neoliberal encubierto en un partido que tiene por nombre "socialista", nada más. Proyecto sur sí tiene propuestas progresivas, aunque al no apoyar la ley de servicios audiovisuales se está hechando atrás su progresismo.
JORDI
Jordi coincido plenamente con vos, no hay que dejar de remarcar el pésimo papel del "socialismo", especialmente el de Giustiniani en relación a la ley de flexibilización laboral (dejar a más laburnates sin trabajo). Así es, los pastelitos son neoliberales encubiertos. Por otra parte, creo que si realmente se buscara un proyecto nacional y popular se debería tender a reestatizar los recursos naturales, reinstalar las redes ferroviarias e impulsar la tan pendiente reforma tributaria. El tema es que si se encamina a un proceso de reestatización de nuestra economía, empezaría a tener más protagonismo la CTA y menos la burocratizada CGT, por lo cual el "compañero" Moyano perdería gran parte de su poder. Es él uno de los más reacios a la democracia sindical, al avance del proyecto reestatizador que debería imperativamente darse en nuestro país para recuperar nuestra autonomía y fortalecer el desarrollo nacional y equitativo.
Para romper con el discurso totalitario neoliberal hay que volver a la consigna del mayo francés: "Seamos realistas, pidamos lo imposible".
Saludos
Mauro
Creo que habria que profundizar la redistribución del ingreso, no basta con reconocer el genocidio Armenio, tenemos que ir por mas leyes, propongo una para reconocer el genocidio ucraniano de 1933 por parte del camarada Stalin, con ello seguramente bajamos la pobreza del 10% actual a cero para el Vicente Nario.
Quisiera recordarle al Dr Gareca que la ley de Genéricos se publicó en el boletin oficial el 28 de agosto del 2002, unos meses antes de la gesta revolucionaria de Néstor, una verdadera cruzada contra la derecha golpista.
Muy buena la nota y me quedo también con la última frase: "Pedirle al Kirchnerismo que logre desmantelar totalmente las estructuras neoliberales, con mas de 50 años de construcción, en 6 o 7 años, es como haberle pedido a San Martín que cruce los andes en un día."
Rescato también, lo que dijo maría que describe perfecto a una parte de nuestra sociedad "me opongo a todo porque garpa" la verdad me da asco su descompromiso (ni con el voto se pueden comprometer), se hacen los que no saben que proyecto de país quieren y sí lo saben, en el fondo lo saben... sólo que a esta altura da un poco de verguenza decirlo, no?
Que grata soy que no me da verguenza decir Viva Perón!
Saludos
Eleo
Gracias Eleo, bienvenida, seguiremos tu blog; y Johnny como siempre bienvenidos tus comentarios. Si no hay polémica, debate, entonces ¿para qué estamos? las verdades absolutas no existen, así que está bueno no estar de acuerdo con todos, disentir, intercambiar opiniones e ideas, aprovechando que estamos en democracia, hace treinta años por decir estas cosas nos mataban.
Saludos
Mauro
Me da gracia ver a los kirchneristas corriendo a Pino por izquierda (a quien votaria si viviese en BS AS), aparte con ese furcio a propósito de la ley de genéricos. Estos idiotas K se beneficiaron con las medidas del vaciador del Bapro Duhalde.
Grande Johnny!!! viste que algo de peronista tenés!! votarías por Pino, aunque no te guste es bien peroncho el compañero. A cantar la marcha!!
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