SuperIntendenta

En el día de ayer asumió Mónica Fein la intendencia de la ciudad de Rosario. Por primera vez en su historia, este municipio es gobernado por una mujer. Este hecho marca un progreso en nuestra democracia: la igualdad de oportunidades tanto para hombres como para mujeres.

Una de las urbes más grandes e importantes del país ahora tiene cara femenina. Este avance democrático e igualitario se da en el marco de una nueva era política, cultural y social de la Argentina y la región. Se nota un gran incremento del género femenino en la vida política de estos países: los casos más conocidos al frente del Poder Ejecutivo Nacional son los de Cristina Fernández de Kirchner, quien acaba de renovar su mandato en nuestra nación, y de Dilma Rousseff en Brasil. En ambas situaciones vemos un mejoramiento de la calidad de vida de la ciudadanía. Estas primeras mandatarias vienen cumpliendo con las expectativas generadas y consiguiendo la aprobación popular.

Esperamos que Fein y su equipo gubernamental estén a la altura de este época de cambios que vivimos, haciendo de Rosario un sitio más justo y equitativo para habitar. Para esto deberán paliar las grandes diferencias, desigualdades entre los sectores altos y medios de la sociedad en relación a los más humildes. Proveer de recursos a las zonas marginales, los barrios periféricos también existen. Se trata de lograr la mayor inclusión social, garantizando el acceso a la vivienda y el trabajo para todas y todos. Estamos en tiempos de bonanza económica y fiscal, así que sólo falta voluntad política para profundizar la democracia. Precisamente ayer se cumplieron 28 años del retorno del Estado de Derecho.

Entonces, en Rosario se abre una nueva etapa. La nueva jefa del estado municipal ya cuenta con los superpoderes que le cedió el Concejo la semana pasada. La pregunta que nos hacemos, en sintonía con la política nacional, es: ¿Mónica Fein será la intendenta de toda la ciudadanía rosarina o será la representante de las corporaciones privadas? Esta es la clave de cuatro años más de gobierno del Partido Socialista en este municipio, ahora con signo femenino.

Por Mauro Reynaldi